EMERGENCIAS
El número gratuito para llamar una ambulancia de emergencia en el Hospital Santa Bárbara es el 160 que se marca de manera directa desde el celular o fijo, también está a disposición el 64-51900. Para marcar a este número desde un celular se requiere digitar el número 4 por delante.
Era domingo, la tarde había caído y la sombra de la noche empezaba a a asomar en Sucre. Ese día, como todos los domingos, la presencia de gente disminuyó en la zona del Mercado Campesino, generando un escenario propicio para los delincuentes. La historia de Miguel resume la experiencia de varios capitalinos que ya sea en esta zona de la ciudad o en otras están expuestos a las agresiones con arma blanca.
Miguel, de 19 años, transitaba la calle Marzana. Tenía prisa para encontrarse con una persona en la zona de San Juanillo con quien tenía previsto asistir a una iglesia evangélica.
A la altura de la calle donde se venden juguetes usados, inesperadamente una persona le tomó de la mano.
- “¡Suéltame, por qué me estás agarrando, no te debo nada!”, dijo Miguel (nombre ficticio).
- “¡Cállate, cállate!”, increpó el desconocido, sacó una navaja e intentó agredirle.
- “¡Suéltame, por qué me estas agarrando!”, volvió a reclamar e inmediatamente el agresor le clavó un puñal en la pierna. Mientras se agachaba de dolor, el asaltante aprovechó de revisar el bolsillo de su víctima y sacar su celular.
- “¡Auxilio!”, atinó a decir Miguel mientras se doblaba de dolor, pero el antisocial ya había huido con dirección del Estadio Patria, por la calle donde venden juguetes usados.
Los peatones que transitaban por el lugar no reaccionaron para perseguir al ladrón, pero sí prestaron ayuda a la víctima que empezaba a desangrarse. Eran las 19:15, recuerda Miguel.
Unos minutos despúes fue socorrido por la ambulancia de Emergencias del hospital Santa Bárbara a donde llegó con un shock hipovolémico grado 4, perdió dos litros de sangre, tenía dañada una arteria importante de la pierna y pudo morir desangrado, relató el jefe Médico de Urgencias, Alberto Avilés.
Ahora, “gracias a Dios”, como dice Miguel, se encuentra recuperándose favorablemente.
La historia no termina ahí. Lo peculiar del caso es que Miguel fue mal herido casi 24 horas después de un similar atraco en la misma zona.
“Eran bajitos, estaban vestidos como raperitos”, describe Miguel a los sujetos que un día antes lo atacaron también con cuchillo.
Día antes, el sábado, Miguel y un amigo caminaban por la calle Demetrio Canelas también con dirección a su iglesia.
Mientras avanzaban, observaron a dos muchachos sentados en el ingreso a una vivienda, lo cual no les llamó la atención porque parecían personas como la mayor parte de la gente que se dedica a sus quehaceres.
Siguieron y de pronto Miguel fue interceptado por uno de los sujetos que portaba un cuchillo.
-“Saca todo lo que tienes”, le dijo.
Él llevaba una laptop y su celular.
Los dos amigos reaccionaron y lograron zafarse de sus agresores, pero en ese intento el cuchillo del agresor cortó una parte del saco de Miguel y el dedo pulgar izquierdo. Cuando la gente que transitaba por la calle se acercó, los malhechores ya se habían dado a la fuga.
Llama la atención, manifiesta el Jefe Médico de Emergencias del hospital Santa Bárbara, que una parte de las agresiones con arma punzocortante sean perpetradas por adolescentes de 14, 15 y 16 años, según refieren las propias víctimas y testigos cuando los pacientes son atendidos.
El director Departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELC-C), Raúl Herbas, por su parte, cree que la mayor parte de los casos de ataques con arma punzocortante tienen como víctimas a personas en estado de ebriedad, que presentan la denuncia pero no se acuerdan quién o cómo era su agresor, qué ropa llevaba y a veces ni siquiera se acuerdan dónde fue.
Herbas sostiene que para realizar una investigación policial es importante que la víctima pueda proporcionar algunos datos. Los únicos casos en los que los investigadores reciben información clara es cuando el ataque es de día y se roban celulares.
Pero lo que más censura la autoridad policial, es que la ciudadanía no tiene la cultura de testificar para esclarecer los hechos, pues prevalece el dicho de “que si no me meto mejor”, cuando en realidad se podría asumir un rol de mayor colaboración aunque sea de forma anónima vía telefónica.
ASALTOS CONSTITUYEN UN 80% DE LOS CASOS
De acuerdo con un informe médico correspondiente a los meses de mayo, junio y julio, el hospital Santa Bárbara recibe unos diez casos semanales de agresiones con arma blanca. En el 80% de los casos, los pacientes fueron víctimas de asalto.
Del total de casos de ataques con arma blanca, un 80% tiene relación con asaltos generalmente a personas ebrias, el 10% con riñas o peleas y el restante 10% con agresiones directas.
El jefe Médico de Urgencias, Alberto Avilés, indica que los días con mayor cantidad de atenciones por agresiones físicas son aquellos donde se celebran fiestas religiosas y ferias populares como La Tablada de Lajastambo. Este año, en un solo día, atendieron seis casos que provenían de esa tradicional feria agropecuaria.
Otro dato que llama a la preocupación, son los crecientes ataques que se producen sin móviles de robo o pelea. “Es una agresión directa, alevosa, premeditada de una persona que podría estar bajo los efectos de sustancias tóxicas, no sólo de alcohol”, sostiene Avilés en referencia a casos donde los agresores parecen estar bajo efectos de drogas.
A partir de su Sistema Integrado del Servicio de Estadística, el hospital Santa Bárbara reportó entre mayo y julio de este año la atención de 206 pacientes por agresión física, de los que el 79.6% (164) corresponden a agresiones por fuerzas corporales u objetos contundentes como puñetes o piedras. Otro 20.2% (42) está relacionado con pacientes agredidos por objetos cortopunzantes como navajas, cuchillos, vidrios u otros.
Otro nosocomio que también tiene un elevado flujo de atención de urgencias es el hospital Universitario, ubicado en la zona de Santa Bárbara, en el Distrito 2. Éste recibe un promedio de tres casos de acuchillamientos por semana. Un 90% de la víctimas son varones de entre 17 y 30 o más años de edad. Se recibieron uno o dos casos de mujeres, según informes de dicho nosocomio ubicado en una zona de alta conflictividad.
Sumados los casos que reciben ambos nosocomios, el promedio de agresiones con arma blanca es de 13 a la semana.
ZONAS DE RIESGO
Según los datos que otorgan las víctimas al llegar a los hospitales, se puede identificar lugares en los que frecuentemente ocurren este tio de agresiones. Detrás del Estadio Patria, en la zona de San Juanillo, la calle Demetrio Canelas, final Poconas, Aranjuez, la zona Cobolde o el Barrio Libertadores, son algunos de los lugares donde ocurren una gran parte de las agresiones por arma blanca. Lo cual no quiere decir que los violentos atracos no se perpetren en lugares céntricos como la misma plaza 25 de Mayo, de donde se tiene el reporte de un apuñalamiento a un varón a las 5:00.
Avilés remarca que el aumento de casos es notorio, con relación a los reportes del año pasado, pues de entre dos a tres casos que se atendían cada fin de semana ahora suma un promedio de seis y algunos días incluso diez hechos.
El galeno adelanta que este fin de semana, en el que se realiza la entrada de la Virgen de Guadalupe, el hospital Santa Bárbara se prepara para recibir una mayor cantidad de pacientes previsiblemente por accidentes de tránsito, agresiones físicas o caídas en su mayoría a consecuencia del consumo de alcohol.
Las jornadas festivas son ajetreadas, a veces los mismos pacientes son agredidos. En otros casos los pacientes no hacen caso de las recomendaciones, pero incluso así deben curar sus dolencias o salvar sus vidas.
ESTADÍSTICAS
- En mayo, el hospital Santa Bárbara atendió a 70 pacientes por agresiones físicas. En junio la cifra fue de 80 y en julio, 58. Actividades como la feria de Alasitas y otros provocan incrementos temporales de casos.
- La mayor parte de las víctimas son hombres jóvenes, usualmente universitarios, que se encuentran “recogiéndose” en estado de ebriedad entre la 1:00 y 5:00, aunque también hay casos que ocurren en otros horarios.
- Si las víctimas se resisten, los agresores usualmente asestan puñaladas en el cuerpo (casi siempre en la zona del tórax, abdomen o en los miembros inferiores). Los atacantes suelen ser, en su mayoría, menores de edad.
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