“La verdad es que se convierte en un gran problema, porque si bien la gente busca realizar la denuncia, cuando es víctima de robo de vehículos, ellos eligen no hacer marcar su motorizado, con el propósito de poder utilizar la documentación, con otros fines”, indicó Martina.
La casa de préstamos descubrió esta situación, cuando se constituye ante impuestos municipales y verifica que desde el 2014 no habría cancelado sus impuestos, razón por la que se constituye en Diprove para solicitar informe sobre los datos del motorizado, constatando que dicho motorizado no fue denunciado como robado, pero porque el propietario del motorizado se opuso a que su denuncia le afecte en la tenencia de sus papeles.
DELITO DE ESTAFA
Este delito que se logra identificar, cuando el propietario no llega a hacer marcar el vehículo denunciado como robado, aspecto que le da la posibilidad de que buscan lograr adquirir algún beneficio con la documentación, incurriendo en otro delito identificado como estafa.
“Es sencillo, no quieren quemar sus papeles, haciéndolo marcar y buscan la manera de conseguir otro motorizado de las mismas características, para realizar la modificación del chasis (remarcado) o lograr otras ilegalidades, como en este caso de solicitar préstamos de dinero, sobre papeles que no tienen un bien”, aclaró uno de los investigadores.
Si bien la norma en el país no obliga a los nuevos propietarios a “poner el vehículo a nombre del nuevo propietario”, a diferencia de la vivienda, este aspecto que no está normado en los municipios, ocasiona un segundo perjuicio, tanto en la ausencia de pago de impuestos, que afecta al primer dueño o el registrado en la documentación.
ASPECTO LEGAL
En la feria de zona 16 de Julio o en otras ferias de venta de motorizados, los nuevos propietarios eligen comprar el vehículo, solo con documento privado, sin reconocimiento de firmas y menos notariado, aspecto que invalidad la legalidad del nuevo bien adquirido por el próximo dueño.
En la instancia policial, investigadores observan que fuera de dicha problemática, se encuentra que los nuevos propietarios de vehículos optan por realizar la compra de motorizados, solo en base de un documento privado de compra y venta, sin realizar la modificación de nombre del bien, aspecto que no solo perjudica el pago de impuestos, sino la posibilidad de realizar la denuncia de robo del motorizado o la recuperación del mismo de forma legal.
Sin especificar la cantidad de propietarios que logran adquirir vehículos con la modificación de nombres de forma legal, para registro en el propio municipio, Diprove evidencia que en su mayoría de los vehículos recuperados o denunciados como robados, en su mayoría se presentan con irregularidades en la documentación, razón por la que las víctimas prefieren no hacer el marcado correspondiente.
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