Sunday, October 14, 2012

Robo de autopartes aumenta en cinco barrios de la zona Sur

Sólo 15 minutos bastaron para que el vehículo de Gonzalo F., un Subaru Forester 2010, quede completamente desmantelado mientras él dejaba una invitación en la casa de un amigo en la zona de Achumani. El asombro de ver su coche en esas condiciones le produjo una descompensación física que lo llevó al hospital.

El robo ocurrió cerca del mercado de ese barrio sureño, hace aproximadamente un mes. Los delincuentes sustrajeron el tablero, el volante, el equipo de sonido, el motor y el cerebro, contó la víctima.

No es el único robo de estas características ocurrido en este último tiempo. La Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove) de la zona Sur registra entre cuatro y cinco hechos cada viernes y sábado . Hace unos meses, era de dos a tres hechos.

El director regional de Diprove, mayor Waddell Prieto, informó que las zonas con mayor índice de robo de autopartes son Achumani, Obrajes, Alto Obrajes, Bajo Següencoma y Cota Cota. “En la zona de Calacoto y San Miguel bajaron los hechos delictivos”, señaló.

Además, en lo que va de octubre hubo al menos 15 denuncias de robo de autopartes en la zona Sur. Hasta el año pasado, según los datos de Diprove, se registraban alrededor de cuatro casos diarios. Los Suzuki y Toyota son las marcas preferidas por los ladrones.

Gonzalo F. presentó la denuncia en la dirección policial; sin embargo, asegura que hasta la fecha no hay resultados sobre sus objetos robados. “Me dicen que están investigando, que necesitan tiempo, pero ya pasó un mes y nada”.

Prieto informó que Diprove zona Sur cuenta con diez efectivos que deben cubrir al menos 15 barrios. Sin embargo, manifestó que se trabaja con equipo de Inteligencia de la división en el centro para dar con los antisociales.

“Estamos intensificando la búsqueda a través de tareas de seguimiento y descartando indicios”, aseveró el jefe policial. No obstante, en lo que va del año no hubo ni un detenido que haya pasado a la cárcel por el robo de autopartes.

Lo que argumenta Prieto es que la Policía identifica a terceras personas con los objetos robados, pero no a quienes ejecutaron el robo de las autopartes.

En barrios como Achumani, Alto Obrajes y Obrajes, los delincuentes operan en mercados, salones velatorios y cerca de parqueos. “Por la investigación que hacemos, los antisociales roban entre las 15:00 y 22:00”, dijo Prieto.

Sin embargo, la vagoneta de Gonzalo F. fue violentada a las 11:00 de un sábado. “Me puse mal y mi amigo me llevó al hospital para que estabilicen mi presión. El vehículo fue remolcado por una grúa y hasta hoy no lo puedo manejar”.

Prieto dijo que actualmente el robo de autopartes se volvió más agresivo. De acuerdo con otros testimonios de víctimas, sus coches quedaron destruidos por dentro y por más arreglos realizados nunca fueron los mismos. “Vamos a dar con los antisociales que operan en la zona Sur para la tranquilidad de los vecinos”, aseguró.

“La gente que opera es profesional”
Según la Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove), los delincuentes que roban autopartes no son delincuentes comunes, sino que poseen conocimientos de mecánica e incluso pueden ser hasta ingenieros eléctricos.

“Ellos conocen qué tipo de equipos tiene un vehículo específico y saben qué deben cortar o sacar para no dañarlo y poder vender las partes luego”, manifestó el director regional de Diprove, Waddell Prieto.

Para sustraer el cerebro, los equipos eléctricos, cables que conectan a otros implementos deben cortar los accesorios correctos. “No tardan ni 15 minutos en hacerlo. Esperan la oportunidad y entre cuatro y cinco operan. Ya tienen sus herramientas y es más fácil para ellos”, contó a Página Siete un especialista en la investigación de robo de vehículos, quien prefirió no ser identificado.

Según el jefe policial de Diprove, los delincuentes se van especializando mientras llegan al país vehículos más sofisticados.

“Operan entre cuatro, seis y ocho personas. Ellos ya se organizan, hay quien realizará el seguimiento, quien ejecutará el robo y quien dará lo sustraído”, explicó el mayor Prieto.

Lo que detectó la Policía es que actualmente lo que más roban son los sensores de los pedales de aceleración que tienen algunos vehículos de último modelo.

“Buscan ese tipo de objetos porque cada uno cuesta entre 600 y 700 dólares, y lo venden incluso en el doble de su precio original porque no se consigue fácilmente”, señaló el director regional de Diprove.

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