En la plazuela San Sebastián, aproximadamente, 300 personas de los talleres de artesanía, cuero y carpintería expusieron y vendieron sus productos el sábado y el domingo.
Los trabajos artesanales son el principal sustento de los reclusos que reciben prediarios insuficientes para poder alimentarse y sustentar a sus familias.
Uno de los delegados internos del penal de San Sebastián Varones indicó que los materiales son adquiridos con sus propios recursos y requieren de más espacios para exponer lo que hacen.
Para elaborar las artesanías, adornos, camas, mesas, ropa tejida en lana e hilo, zapatos, billeteras, cinturones los reclusos pasan talleres de capacitación todos los días.
Entre las obligaciones que deben realizar dentro del penal y la asistencia a la capacitación, los internos reparten su tiempo para producir. Diariamente se dedican a esta actividad entre 6 y 8 horas.
FEICOBOL Por falta de recursos económicos los trabajos de los reclusos no podrán ser llevados a la Feria Internacional de Cochabamba, que se inaugura esta semana, por lo que los privados de libertad pidieron al público que asistan los domingos a los patios de los penales para comprar sus productos.
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