Teniendo como autor intelectual de este crimen al padrino del empresario soyero por una deuda con el victimado, la Policía aprehendió al posible autor material, quien recibió 5.000 dólares para quitar la vida a Octavio Canaza.
Anoche, lidiando con el mal tiempo y el camino intransitable; el autor material estaba guiando a los agentes policiales para dar con el paradero exacto del cuerpo para desenterrarlo y trasladarlo a la morgue judicial para su autopsia.
El aprehendido relató a los policías que el empresario estuvo encerrado a la espera de la negociación durante 10 días en una habitación precaria y en condiciones insalubres en dicha propiedad donde después enterraron su cuerpo.
“Vamos a partir en este momento a otro punto para apoyar en las investigaciones”, señaló horas antes Rubén Suárez, comandante departamental de la Policía, quien dio por esclarecido este hecho.
Canaza desapareció cuando salió a primeras horas del día miércoles 1 de febrero de su casa, situada en Satélite Norte (Warnes), para ir a ver sus sembradíos de soya en la localidad de San Juan de Yapacaní, según refirió su esposa Margarita Molina, ante la Policía y los medios informativos.
La denuncia del supuesto plagio se conoció después de 15 días, en el que recién la familia puso en conocimiento de la Policía y que en este lapso de tiempo los supuestos plagiadores se contactaron con la esposa del soyero para pedirle la suma de 200 mil dólares a cambio de su rescate, situación que no ocurrió pese a que la familia entregó el dinero, tras acordar el lugar de transacción en la comunidad Clara Chuchio (zona Satélite Norte).
De inmediato se movilizaron agentes de la Dirección de Análisis del Crimen e Inteligencia (DACI) de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), logrando localizar la camioneta con la que se transportaba el empresario soyero, la misma que fue hallada calcinada en una zona alejada del municipio de Hardeman.
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