De acuerdo a los datos obtenidos por el Potosí, la banda de cacos primeramente violentó los candados y chapas de una tienda de venta de lanas, a dos casas de la joyería, a la cual ingresaron.
Ya al interior de la tienda de lanas, los antisociales abrieron un primer forado en la pared (un metro) para ingresar a un laboratorio de foto estudio fotográfico y desde ese inmueble abrieron paso a otro para llegar a la joyería.
“Se han entrado a mi tienda y el objetivo era entrar a la joyería. Han roto cantados, han forzado la llave, han roto puertas hasta llegar a la joyería. Después han vuelto y me le han puesto cando (a mi puerta) para que no sospechen, no era mi candado: era otro. Han hecho perforaciones en la pared, han roto puertas”, expresó la dueña de la tienda de lanas quien también se quejó de que los cacos se llevaron el poco dinero que tenía en su caja.
Lo más impresionante fue lo que comentó el dueño de la joyería, que pidió que se mantenga en reserva su nombre y apellido: los delincuentes llevaron hasta su tienda un equipo de soldadura a oxigeno con el que abrieron su caja fuerte donde guardaba las joyas una vez concluida la jornada de trabajo.
La caja fuerte de un espesor de 8 a 10 milímetros (1 centímetro) fue abierta como con abrelatas con el tubo de oxigeno que usaron. “La caja fuerte lo han abierto con oxígeno, está abierto la caja fuerte, está cortada con oxigeno, le han sacado la clave y todo. Es una pérdida de más de 50.000 dólares. Todas mis joyas se lo han llevado, todo de oro como anillos, cadenas, dijes. No tenía dinero”, expresó acongojado el propietario de la joyería.
Ahora la Policía investiga quiénes podrían ser los responsables del robo e incluso no descartan que sea una banda de delincuentes extranjeros por el modus operandi que ejecutaron para robar la joyería.
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